¿Qué es el código de comercialización de sucedáneos de leche materna?

Hoy comienza la Semana Mundial de la Lactancia Materna 2017. 

Desde hace 25 años se viene celebrando la SMLM, una iniciativa que coordina la WABA (world alliance for breastfeeding action) y que concentra actividades en torno a la promoción de la lactancia alrededor del mundo.

Este año, el tema es “Sosteniendo la lactancia materna unidos, por el bien común, sin conflictos de interés”

Desafortunadamente, es muy necesario el activismo contra los conflictos de interés que existen en torno a la lactancia materna.

Se calcula que la alimentación con fórmula a un bebé durante un año tiene un costo aproximado de mil euros anuales. Con estos datos, comprendemos el interés de la industria farmacéutica en la alimentación infantil.

Debido a la importancia de la lactancia materna como vehículo de salud pública tanto en países desarrollados como en desarrollo, la OMS y UNICEF publicaron el Código internacional de comercialización de sucedáneos de leche materna (1981).

¿Qué es el Código de comercialización de sucedáneos?

El código es un conjunto de reglas destinadas a promover y proteger la lactancia materna.

Es una forma de regular la comercialización de sucedáneos de leche materna para evitar las prácticas abusivas de la industria farmacéutica, controlando la publicidad y el etiquetado de los productos.

Según el propio documento: “El objetivo del presente Código es contribuir a proporcionar a los lactantes una nutrición segura y suficiente, protegiendo y promoviendo la lactancia natural y asegurando el uso correcto de los sucedáneos de la leche materna, cuando éstos sean necesarios, sobre la base de una información adecuada y mediante métodos apropiados de comercialización y distribución “.

Las normas del Código están sujetas a todos los productos destinados a sustituir de alguna forma a la leche materna, por lo que están incluidas todas las fórmulas de leche artificial, alimentos destinados a niños menores de 3 años como lo son papillas, yogures especiales, bebidas etc, así como los chupetes y biberones.

¿Cúales son las normas del Código?

Algunas de las reglas son:

1. La responsabilidad de los Gobiernos de asumir una correcta difusión e información con respecto a la nutrición de forma objetiva.
2. Los materiales impresos, visuales o auditivos destinados a la información para madres embarazadas y lactantes sobre nutrición de bebés y niños de corta edad deben aclarar la superioridad de la lactancia natural, y no utilizar imágenes o textos que idealicen la alimentación con biberón.
3. Está prohibida la publicidad de los productos incluidos en el Código, incluyendo el contacto del personal comercial de las empresas con las familias.
4. Está prohibido cualquier tipo de descuento u oferta en los puntos de venta.
5. Está prohibida la distribución de muestras gratuitas de sucedáneos de leche materna o cualquiera de los productos del Código, ya sea por medio de las propias compañías o del personal sanitario.
6. Está prohibida la difusión y promoción a través de internet y redes sociales.
7. Está prohibida la exposición de carteles o material promocional de las compañías farmacéuticas como bolígrafos, colgantes o pegatinas, en los centros de salud.
8. Están prohibidos los regalos o incentivos económicos por parte de las empresas a los trabajadores o instituciones sanitarias.
9. Está prohibido el suministro a hospitales de sucedáneos de leche materna de forma gratuita o a bajo coste, así como utensilios para su preparación.
10. Está prohibido incluir en el etiquetado imágenes o textos que idealicen el uso de los productos y quedan prohibidos los términos “humanizado” o “maternizado” en los envases.

Por desgracia, actualmente sólo 39 de los 194 estados miembros de la OMS tienen leyes que respetan todas las reglas del código. España, está entre los 135 países que sólo contemplan algunas de las normas del Código, incluso muchas están legisladas con cambios sustanciales.

Por ejemplo, la prohibición de publicidad, promoción o descuentos de fórmula artificial solo legisla en España a los sucedáneos de tipo 1 (para menores de 6 meses), mientras que las leches tipo 2 y 3 se libran de la prohibición.

Hoy por hoy, aun nos queda mucho camino por recorren en cuanto a la correcta promoción de la lactancia materna y a la poco ética publicidad de sus sucedáneos.